tubeless en el ciclismo, ¿si o no?

tubeless en el ciclismo, ¿si o no?

  Hoy vamos a hablar sobre el sistema tubeless en nuestras ruedas como sustituto de las cámaras. El debate está servido: Tubeless si, tubeless no.
Como todo en la vida, no es blanco o negro y aquí volvemos a tener un claro ejemplo.


  Cuando hablamos de las ventajas y los incovenientes del tubeless frente a los neumáticos con cámara habituales, debemos priorizar, como siempre, el uso que cada uno le da a su bicicleta. A partir de ahí y sabiendo la prioridad que tienes sobre la bici, podrás decidirte a probar el tubeless y ver si tú también te haces adepto.


  Una cosa está clara, con tus neumáticos tubelizados, reduces al mínimo el número de pinchazos. Ahora bien, no es magia, los pinchazos pueden aparecer de igual manera y el cambio o reparación suele ser algo más engorroso y más aún si no estamos puestos en la materia.

DESVENTAJAS DE TUBELESS

  Tubelizar nuestras ruedas también requiere de un esfuerzo económico mayor, puesto que no todas las cubiertas y llantas son compatibles y ya sea adaptándolas o comprándolas nuevas nuestro bolsillo se verá afectado de manera considerable. A esto, debemos sumarle además, el cambio de líquido que deberemos hacer cada “X” meses para que este siga con la textura adecuada y cumpla con su cometido.

VENTAJAS DE TUBELESS

  Mencionados los incovenientes más visibles, pasamos a hablar de sus ventajas.
La principal, ya mencionada, reducir prácticamente a cero tus pinchazos y es que, muy mala suerte debemos tener para encontrarnos un pinchazo que el líquido no sea capaz de sellar en un instante.

  También debemos de sumar la variedad de presiones con el que podemos jugar en función del terreno por el que vayamos a desarrollar nuestra ruta o nuestra competición, este sistema nos permite rodar con presiones “bajas” haciendo mucho más cómodo el tránsito por zonas desérticas o con tierra suelta donde necesitemos más agarre con una menor presión en nuestras ruedas. Son dos ventajas que para los ciclistas asiduos y para los que compiten son prioritarias en la mayoría de los casos.

RECOMENDACIÓN

  Con estos datos en la mano has de ser tú el que decida si merece la pena pasarte al tubeless o no, en función de los kilómetros que hagas y de cuanta calidad sean. Si lo haces… quizá no vuelvas a cambiar una cámara en mucho tiempo.